miércoles, 7 de septiembre de 2011

Balance Mundiales Bomberos/Policias (EDITADO)

Hace dos años por estas fechas, mi buen amigo, el maestro Calle, me dio el último empujoncito para liarme con este mundo del bloggismo. No lo veía claro, pero mi afición por la escritura, y las pintorescas vivencias que vivo de vez en cuando, me autoconvecieron que sería interesante inicar mi andadura y quizá a alguien le interesara seguir mis pasos, aunque solo fuera por comprobar que hay muchas formas de encarar el día a día...

La primera entrada en el blog coincidió precisamente con anteriores mundiales de policías y bomberos en Vancouver. Aquellos juegos no tuvieron nada que ver con estos. Pese a que todos los que fuimos teníamos muchas espectativas depositadas en esta organización, este escenario, y estas fechas tan emblemáticas para los bomberos de todo el mundo, pues se da el caso de que en este mismo lugar, hace justo 10 años, perdieron la vida 300 bomberos, precisamente en el ascenso de un coloso que se los engulló sin escrúpulo alguno.

Equipo de Stair Race de Barcelona; seguramente el más laureado en la jornada...

La irrupción en el escenario mundialista del pavor a los posibles efectos del huracán Irene, condicionó por completo la competición y nuestro ánimo. Perplejos, fuimos testigos del 'sitio' oficial de Manhatan, que por tres días, dejó de disponer de transporte público, y por orden expresa del alcalde, quedaba prohivido toda actividad programada al aire libre. Tras los tres días de sitio, el único resultado palpable tras tan drásticas medidas aplicadas, eran hojas y ramitas caídas por la calle. Algún árbol  cedió, cierto, pero nada que ver con las amenazas que se lanzaron.

Ese primer fin de semana de competición era precisamente MI FIN DE SEMANA, pues en tres días, optaba a 5 medallas en las dos pruebas que más laureles me han aportado en mi trayectoria deportiva-bomberil, la carrera de escaleras y el triatlón.

El triatlón nunca lo hicieron (y yo con los 300 euros que me ha costado traerme la bici aquí, con neopreno, casco, etc, etc). La carrera de escaleras, la pasaban al sábado siguiente, un desastre para buena parte del equipo de Barcelona. Otra prueba específica de bomberos, el Ultimate Firefighter por equipos, también la cancelaron.

Pasaba a debutar con el Muster, otra prueba específica de bomberos en la que un equipo de 6 compañeros que capitaneaba, íbamos con muy poca preparación global, pero con una muy buena estrategia y experiencia merced a los tres años en los que había capitaneado equipo y en los que siempre habíamos conseguido medalla. La suerte, sin embargo, no nos acompañó, y pese a desarrollar la mejor organización, sendos errores, nos dejaron fuera de medalla.

Equipo de Muster de Bomberos de BARCELONA. Mucha madera pero hay que pulirla...

No empezaba nada bien la competición para mi, hábido de puestos de honor, pero el empeño no cesó. Me lié entonces a nadar en Aguas Abiertas, que no estaba en el guión, pero que siempre he participado quedandome siempre a las puertas de la medalla. Este año llevaba mi nuevo traje Aquaman Cell, pero volví a fallar en previsión. La noche fue larga y no quise madrugar mucho. Estaba en la playa de Brooklyn, al final de diversas líneas de metro. Subestimé el tiempo necesario para llegar, y a ocho minutos del inicio, estaba en bici, vestido de calle y sin saber ni donde era el evento específicamente, ni dorsal, ni chip... perfecto.


Con la agilidad que la costumbre en este tipo de situaciones me confiere, conseguí llegar a la arena con chip, gorro, mano pintada, cambiado, bici atada en valla, gafas en mano, y neopreno en el hombro. Tan solo me faltó en necesario encuentro con el inseparable 'amigo' del deportista temprano, el wc, que tuvo que esperar un buen rato mi visita. Todavía no se cómo me pude poner el neopreno a tiempo. Eso si, no tenía ide el recorrido, por lo que cuando oí el bocinazo de salida, tan solo podía seguir a quienes me dieran más confianza. El agua muy sucia; poco agradable para estar 3200 metros desplazándose por ahí. No me puedo quejar del resultado final, un 6º lugar en mi categoría, pues como se puede comprobar, nada apuntaba a un gran triunfo a 8 minutos del comienzo.

Y llegaba el gran día. Siete días después de mi llegada, mis piernas no parecían las mismas. Durante cinco días estaba convencido que ya no iba a disputar la prueba, y mis actividades neoyorkinas, digamos que no fueron las más adecuadas para mantener el cuerpo en las mejores condiciones.

El alojamiento era... barato. Eso si lo tenía. Estaba en Harlem east. El nombre asusta a los foráneos, pero no es para tanto. El problema es que estaba a casi 100 calles del Empire Estates, por ejemplo. Por un lado la lejanía del meollo de la ciudad, por otro la masificación del apartamento, que era compartido al más puro estilo Hostel, pero sin los servicios que estos suelen tener. Habitaciones sin ventana, si te tocaba habitación, claro, porque yo los cinco primeros días y por tanto noches, estaba en una litera en La Habitación polivalente que servía de cocina, comedor, sala de ordenadores (los que cada uno traía, claro), sala de bailes, de conferencias, etc. Además mi cama estaba justo en la trayectoria del chorro de aire acondicionado que como buenos americanos, tenían a todo trapo todo el día y noche... Se puede decir que dormí las horas que caben en los dedos de un mano los cuatro primeros días.

A ello le sumamos la 'cervezada' que nos pegamos para 'celebrar', las cancelaciones de las pruebas y de que se acercaba el fin del mundo con el nombre de Irene... Al día siguiente por la mañana, tras sobrevivir al huracán de bolsillo que nos visitó, salimos a correr para celebrarlo con diversos piques que acabaron de 'adovar' las piernas y los recursos físicos disponibles para la competición.

Desde que reprogramé la situación y se confirmó la reprogramación de la subida al WTC7, cambié la estratégia y intenté conservar todos los recursos. La cosa mejoró, pero no era comparable a mi estado al 100%. Es resto de competidores seguro tienen historias parecidas a las mías o mejores incluso para minimizar responsabilidades, pero este es mi blog... jeje.

Como decíamos, llegaba el sábado 3 de septiembre. Con buena puntualidad llegamos a la base del coloso, sitiado por el servicio de seguridad del edificio. Llevaba desde el mes de enero bombardeando de mails y hasta llamada a los responsables de la coordinación de la carrera, a los responsables de la federación, a los responsables de la seguridad de la torre... NADA. Nadie soltaba prenda de cómo narices iba a ser el recorrido. No me lo podía creer. ¿Como era posible que en una prueba de esta categoría nadie soltara prenda de las características de la misma? Es como si el atleta olímpico, salvando las distancias..., saltara al estadio olímpico sin saber si ha de correr los 110 metros vallas, o los 10.000... Obviamente las cosas cambian según sea la longitud del recorrido, su dureza, características, ...

Por no saber, no sabíamos ni las plantas que se subían. Durante meses apareció en la web oficial el dato de que se subían 49 plantas, pero luego, a una semana y poco, aparecía una carta con 37 plantas. Nadie aseguraba el que. A los neófitos en este tipo de pruebas le pareceré un histérico exagerado con tantas necesidades de conocimiento, pero hay mucha diferencia entre dos escaleras cuando: se gira a derecha o izquierda en cada rellano, si hay dos, uno, cuatro tramos de escaleras por planta, si son de 6 o de 12 escalones cada tramo, si hay una o dos barandilla, la altura de los escalones.... En fin, un sin fin de detalles que definen la escalera y que no teníamos idea.

Gracias a las indicaciones de un compañero que está viviendo en New York y que pudo hablar con un responsable del edificio, le filtró la información que la escalera tenía dos tramos por planta, de 8 escalones, girando a izquierda y que se podía agarrar de las dos barandillas, llegando hasta la planta 49.

Con esas premisas, estuve preparando mi último mes de preparación específica. Que os parecerá una chorrada, pero no. Este año, mi super entrenador, el maestro Alvaró Rancé, me convenció de que no era necesario pegarse entrenos maratonianos en la escalera subiendo tres mil plantas y llevando carga encima. Con unos sencillos ejercicios específicos isométricos y demás en cuatro simples tramos de escalera, parecía suficiente... Yo le creí cuando estuve a punto de ganar al campeón Mario Verdugo en la última etapa del Circuito Nacional de Carrera Vertical Airbox, en el que bajábamos solo ambos de la barrera de los 4 minutos, y yo había tenido el handicap de no descansar nada y estar liadísimo con la organización de la prueba.

Pues va y en la reunión técnica del día anterior, definen las escaleras y no tenía NADA que ver con lo previsto. Hablaban de tramos de hasta 34 escalones por planta (una locura), giro a derecha, una sola barandilla disponible por la excesiva anchura de la escalera, cambios de escalera a medio recorrido, etc... Me vine un poco abajo. Parecía que todo el entreno específico podría resultar estéril, con lo aburrido que me resultó hacerlo todo...

De todas formas, no me cuadraba en absoluto lo que decían, ni el tono que utilizaban al decirlo. Se palpaba desconocimiento y nula afición por la subida de escaleras.

Ello me hizo buscar a toda costa una inspección visual previa a la carrera a toda costa. Como he dicho antes, el blindaje del edificio era total. No permitían el acceso al edificio de ninguna forma. Todo el dispositivo lo montaban en el exterior. Pero gracias a mi puntualidad inusual de aquel día, los pude pillar despistados en un cierto momento que estaban conectando los sensores de chip en la entrada a la escalera. En ese momento, la gente hacía cola para retirar el dorsal y chip, otros hablaban entre ellos, o iban al baño... Yo no, yo buscaba el punto devil... Tras unos segundos disimulando por la entrada de la escalera, como quien no quería la cosa, empiezo a subirlas. Bajo un par de veces para demostrar inocencia en mis actos, y al ver que nadie me recrimina nada, tiro para arriba...

Aquello era un caos. Imposible sacar conclusiones ni ninguna pauta de reiteración en los tramos, al menos hasta la planta marcada con el número 10. Sabía que tendría problemas con mi actuación. Esta gente no está para tonterías y cuando en la reunión técnica les recriminé que cómo era posible que no dieran toda la información de cómo era la escalera, me contestó diciendo que 'este edificio ha sufrido dos ataques', a lo que yo le respondí: ¿Y nosotros que somos, terroristas?, somos bomberos, caramba! (lo de caramba no fue así, que desconozco la traducción...).

Llegué al menos a la planta 20, y cuando bajaba, cinco energúmenos me intercentaban en la zona baja de la escalera con walkie talkies y cara de muy pocos amigos... Me habían visto, obviamente, por las cámaras de seguridad, y había abierto algunas puertas de sectorizacion para llegar a la segunda escalera que se subía. Les pedí disculpas y les dige lo que es una realidad, en todas las pruebas de stair race de los otros mundiales en los que había participado, nos habían permitido visualizar las escaleras, como mínimo durante la mañana de la competición, como no puede ser de otra forma a mi entender.

Se reunieron las altas esferas y estuvieron a punto a punto de descalificarme. Me salvó conocer con buen trato a uno de los peces gordos de la federación que justo estaba allí ese día dada la trascendencia de esta prueba. La supuesta ventaja a la que me atribuian, desapareció a los dos minutos de salir a la calle ya que lo hice público a todos los competidores que pude y entre ellos se pasaron la infor. Mi inteción era saber si estaban o no en lo cierto con las explicaciones del día anteior, y NO, no cuadraba NADA de cómo lo habían explicado. Estaba claro que el coordinador, con una panza considerable, no se había molestado en recorrer las escaleras para contrastar la información...

Subíamos por grupos de edad; hasta 30 años, 34, 39, 44, ... Ya estaba equipado. El equipo era peor que el de Airbox usado en el circuito nacional y más pesado, pero era igual para todos. La gente no bajaba de la planta 37... tan dura era la subida??. A ultima hora, veo uno de mis compañeros de equipo, Carlos Luís, que justo bajaba de arriba. Me dice: se me ha hecho muy larga... más que la torre espacio de Madrid, la subida más exigente de las que se celebran en España. Cautela, asumo. La subida se da cada 30 segundos. Demasiado corta, es más que probable que tenga que adelantar participantes... y eso es muy complicado en esta prueba.

Me dan la salida y empiezo a subir con la torpeza que desconocer una escalera te supone, y más cuando he de luchar contra mis automatismos adquiridos ante tantas sesiones específicas opuestas a lo que allí me encontraba. Llegados a la planta 10, la secuencia se estabilizaba hasta el final y era el momento de la verdad, de imprimir un ritmo constante y lo más demoledor posible. La unica barandilla se hacía notar, así como las tiradas de 11 escalones, tres o cuatro más de lo habitual. Costaba probresar. Tengo que decidir de urgencia cambiar mi estrategia de ascenso; normalmente, 'ataco' el tramo subiendo dos escalones del tirón y sigo así hasta el siguiente rellano. Dada la dureza de esta escalera, era un suicidio mantener esa estrategia hasta arriba. Al tercio de ascensión veo que sinó paso a atacer con un primer escalón para luego seguir de a dos, no llego... Rectificar es de sabios, dicen.

Alcanzo un primer participante. Al oirme, se para y se aparta a la derecha dandome ánimos. Perfecto; así lo marcan las normas, pero el fair play de todos no es siempre el mismo. Se lo agradezco con un puño con pulgar hacia arriba en su honor. Sigo constante con debilidad en las piernas y un ritmo de respiración algo forzado; debía habermela jugado con el supletorio de aire que podía haber activado en el equipo, pero no quería jugarme con la reserva de aire, no fuese a faltarme antes de llegar; debes llegar arriba con aire en la botella...

Enseguida alcancé otro participante. Su deportividad no estuvo a la altura del anterior. No hace lo más mínimo para facilitar mi adelantamiento. Tengo que quedarme a su espalda frenandome unos instantes para que no haya duda que estoy ahí. Ni caso. Me obliga a seguirle un tramo y en el siguiente, abrirme, dejar la barandilla (eso te hunde), encima acelerar el paso bruscamente, y retomar la barandilla antes de llegar al siguiente rellano. Efectos secundarios: rotura de ritmo y asfixia prematura... El 'compañero', me había restado moral, tiempo y fuerzas, pero quedaba menos para llegar... Dos plantas más arriba, mierda, otro 'compañero' sordo o .... La misma operación que me vuelve a perjudicar claramente. No tengo aliento para gritar, quejarme o darle un empujón por incumplir normativa, he de subir como sea.

Penúltima planta... aprieto los dientes y como puedo supero el sensor de chip. Roto. Por primera vez me había controlado el tiempo con un cronometro propio; no quería estar a merced de la organización en el tiempo tras un esfuerzo tan titánico. Solo soy capaz de ver 6 minutos 25 segundos y me desplomo. Enorme dispositivo de recepción de competidores. El mejor que he vivido nunca, todo hay que decirlo. Te dejas caer en plan cadaver y ellos lo hacen todo... Te quitan equipo básico, te sientan en una silla con ruedas y te llevan a toda velocidad hacia una zona de recuperación, con sillas ultracómodas con unas bolsas de agua con hielo para sumergir los dos brazos, y un voluntario te trae una bolsa gigante de hielo para ponerte en la nuca, piernas, o donde prefieras. Luego unas camillas por si no has tenido suficiente. Voluntarios te van trayendo agua fresca y isotónico a demanda.

Recuperado el aliento, intengo levantarme y las piernas no responden. Había llegado al fallo muscular como hacía tiempo que no experimentaba. Desde la carrera vertical de la Torre Mapfre, enlos mundiales de Barcelona, no me había sentido igual. Entonces gané con un tiempo de 5.01 en 40 plantas. Aquí habia hecho casi un minuto y medio más y eran teóricamente 3 plantas menos. La realidad era que esas 37 plantas en ese edificio, equivaldrian en un edificio convencional en España a 46 plantas o más.

Nadie sabía nada de si el tiempo era bueno o no. Algún compañero de Barcelona se había tomado más de 8 minutos. No era malo pues. Uno de los rivales fuertes de mi categoría, me dice que ha hecho más de 7 minutos... Esto empieza a oler a medalla.

Uno de los clarísimos favoritos a realizar el mejor tiempo, Patrik, de Madrid, ganador de la última subida a Torre Espacio que se realizó y mejor tiempo en Vancouver junto a Mario Verdugo, parecía que se había desfondado en las últimas plantas al imprimir un ritmo inicial quizá demasiado ambicioso

Aprovecho las únicas vistas de la planta de llegada para disfrutar 'gratis' de las vistas de downtown, y hasta de midtown, con el magestuoso Empire Estates al fondo. Especialmente impresionantes las dos 'piscinas' que han construido en el solar que ocupaban las Twin Towers, resiguiendo exactamente su perimetro, pero dejando el agujero en homenaje postumo. Precisamente estuve en una de las torres en su planta superior, en mirador, a finales de los 90, y todavía guardo el video casero en el que filmaba incluso el ascenso a las más de 100 plantas que tenía.

Sacan las clasificaciones provisionales. Medalla de oro!!! Un alivio y alegría inmenso recorren mi cuerpo. Cuanta presión liberada... En mi, sin embargo planea el pesar por los dos adelantamientos que me habían condicionado sin duda el resultado final. Sin ellos, puedo casi asegurar que hubiese conseguido el mejor tiempo de los españoles. El compañero de equipo, Carlos Luís, especialista igualmente en este tipo de pruebas, me saca 3 segundos, y un bombero de la comunidad de Madrid, 4 segundos. Los tres mejores tiempos, realizados por dos Kiwis (neozelandeses) y un Italiano que por lo visto se dedica al circuito mundial vertical. Todos son menores de 30 años y estan a un nivel casi inalcanzable para mi, como mínimo el primero y segundo. Así pues ORO, sexto de la general muy cerca del cuarto puesto.


Podium senior B full gear...


Tocaba pensar en la segunda subida, esta vez sin equipo... Las fuerzas eran pocas, pero la moral, alta. En esta prueba volvía a enfrentarme con los rivales directos de la otra subida, y nuevos rivales que, o bien eran policías y nunca corrieron la primera prueba, o bien se habían reservado sin correrla antes para estar a tope aquí. Realmente, a mi la prueba que me llena es la subida con traje de intervención, pero no escatimo esfuerzos en esta otra subida, como es lógico.

No sabía como plantearla y me la jugué subiendo 'corriendo', sin votar, pero moviendo las piernas como si corriera. En la planta 25 aproximadamente, tuve un bajón y tuve que reducir un poco la velocidad, pero esta fue siempre buena. Llegaba con 4.20 en mi crono y buenas sensaciones. Sabía que lo había hecho bien, pero no sabía si seria suficiente para adjudicarme otra medalla. En esta ocasión, había tenido que adelantar a CINCO participantes... Aquí hubo mejor proporción de fair play, pero no fue plena y volvió a tocar adelantar, pero nada comparado a lo que supone hacerlo equipado.

Finalmente, volví a ser sexto de la general; increhible, pero por contra, quinto de mi categoría!!! . Es decir, de los seis primeros de la general, cinco eramos mayores de 35 años...

Mi compañero de equipo, Carlos Lopez, repescado para mantener el equipo de Barcelona, prefirió renunciar a la subida previa equipado y supo aprovecharlo sacandome 9 segundos y llevandose un bronce que estuvo muy caro en Manhatan. Por contra, le devolví la pelota a Carlos Luís, que me había superado antes, por los mismos segundos le superé yo a el, aunque igualmente fue paradógico que aquí se llevó una medalla de plata y en la anterior, la de chocolate...

Por equipos, una de cal y una de arena. En el equipo masculino con equipación de intervención, oro incontestable al sumarnos Carlos Luis y dos bomberos que con el las cancelaciones habían quedado sueltos, uno de Castro-urdiales, y el otro, el maño Alberto Gomez, ganador del circuito nacional 2010.

En el equipo en subida sin traje de intervención, un probleme en el registro del equipo, dejó a Carlos Lopez sin código asignado para completar el equipo de Barcelona, y incomprensiblemente, la organización ha sido capaz de recolocarlo en la clasificación por equipos. Somos, no me cabe la más mínima duda, medalla de plata técnica, pero no han querido entrar en razones. Me da lo mismo, los tiempos hablan y Barcelona a vuelto a demostrar su altísimo nivel mundial en esta especialidad.

Ahora todo ha acabado y toca descansar, descansar mente y cuerpo para disfrutar, al fin, de la compañía de mis hijos a los que hace mucho tiempo que no veo, especialmente mi hija Martina que acaba de nacer...


visita a uno de los 90 parques que hay solo en Manhatan...


sábado, 20 de agosto de 2011

CARRERA VERTICAL - BOMBEROS

Llevo muchas semanas sin actualizar el blog, y no es por falta de material, no. Quienes me siguen de vez en cuando saben que el contenido de mis entradas se basa en mi experiencia deportiva, con alguna aportación esporádica de mi profesión, la de bombero, que justo este mes llega a los 12 años (cuatro trienios...). Casi un tercio de mi vida... ¡cómo pasa el tiempo!!.

Con esta entrada, auno ambas temáticas de forma plena. 'Carrera Vertical'. Un concepto que de entrada no tiene que ver con el universo bomberil, pero que desde agosto del 2003, si, al menos para mi y para un puñado de 'enfermos' del deporte extremo y compañeros de profesión. Por aquel entonces, me aventuraba a participar en la llamada por algunos medios de comunicación: 'prueba reina' de los Juegos Mundiales de Bomberos y Policías de Barcelona. Fue una semana de competición a imitación de los entrañables juegos olímpicos del 92. Inauguración en el propio estadio olímpico, con desfile por la pista, espectáculo multitudinario, pirotecnia a discreción, y un sin fin de similitudes. El calendario deportivo también muy parejo al de los JJ.OO, pero con peculiaridades bomberiles y policíacas como esta:  la carrera vertical de escaleras, en la que se escogió el edificio que aún hoy es el más alto de Catalunya  la TORRE MAPFRE.



Con sus 40 plantas, el reto era realmente importante y exigente. Especialmente en la modalidad de subida con equipo completo de intervención. El día de la carrera nos encontrábamos inmersos en una fuerte ola de calor, con temperaturas superiores a los 35 º celsius a la sombra y con la tradicional 'xafugor' asfixiante. A ello se le sumaba el traje con protección térmica que solo ponértelo te hacía romper a sudar y los más de 20 kg que supone toda la parafernalia, más la guinda de ir respirando aire embotellado a trabes de una máscara. Esfuerzo extremo sin duda.

 
Ultimo piso de ascensión a la Torre Mapfre en el 2003. Agarrandome de donde pillaba...

La zona de llegada era un escenario dantesco, con todos los participantes esparcidos por los suelos, intentando recobrar el aliento tras el titánico trabajo realizado. A mi me costó 10 minutos de relog para poder hablar; no miento.

Aquella mañana de agosto, mi rendimiento deportivo fue sorprendente para mi, realizando el mejor tiempo de todos los participantes y a solo un segundo de la barrera de los 5 minutos, pese a que por Antena 3, encumbraron como ganador a un bombero de Madrid al que le saqué algunos segundos... pero como el salió en una tanda anterior a la mía, y era de Madrid... pues ya les fue bien tomar como referencia su mejor tiempo provisional. Así es el mundo de la prensa, con todos mis respetos. Al menos en TV3, la 1 y otros medios, dieron la información correcta.


Recuperandome en la terraza de la Mapfre tras el ascenso...

Desde aquella edición de los juegos mundiales, no se ha subido a una torre tan alta. En Quebec 2005, se subieron unos 32 pisos, en Adelaida 2007, 35, y en Vancouver 2009, unos 28.
Dado mi sorprendente resultado en Barcelona, siempre que he podido, me he preparado como buenamente he podido esta prueba en cada edición del mundial. En Quebec gané el oro en mi categoría pero fui el segundo mejor tiempo, en Adelaida no pude ir porque esa misma semana nació mi hijo Tiago, y en Vancouver, hice plata tras un bombero local que se conocía supongo mucho mejor el trazado que yo en el Sheraton de esta bonita ciudad canadiense; como desquite, conseguí el oro en la subida sin equipo de intervención...; la cuestión era ganar un oro!!
Ahora toca competir en la mítica ciudad de New York, la ciudad de los rascacielos, y en un escenario todavía más mítico, el World Trade Center, en el único edificio que 'funciona' desde los fatídicos atentados del 11-S, especialmente memorables para esta profesión de bombero ya que allí perdieron su vida 300 compañeros del tirón durante las maniobras de desalojo de las torres gemelas. Y precisamente tiene lugar este evento, a 10 años vista de aquel trágico día. Casualidad, NO. Forma parte de los actos que se han organizado en NY para tal recuerdo. Y por ello se ha desplazado las fechas de competición a una semana vista del propio 11-S, ya que lo habitual en estos juegos es realizarlos en julio.


El edificio en cuestión es el WTC7 (el de la foto...), de peculiar construcción, con base triangular y 52 plantas de altura. No se alcanzará esa altura máxima por varios motivos. El primero porque las tres últimas plantas son particulares, y en segundo lugar porque la autonomía de los equipos respiratorios no permitirían alcanzar la cima a muchos de los participantes. No os asustéis, en una situación real, sería casi imposible reproducir ese ascenso con tanta altura y respirando aire ya desde la planta baja. Lo que se hace es subir hasta la 'zona caliente' (donde está el fuego), y allí se conecta el equipo. En este caso se respira desde abajo por la competición en si.

En total serán 37 plantas, que no son pocas...

lunes, 4 de julio de 2011

Finde MARATONIANO

Como si de un Ironman se tratara, a las 6 de la mañana de este lunes me metía en la cama 'definitivamente'. El viernes a las 8 de la mañana me despertaba para iniciar la peregrinación que finalizaba en la susodicha madrugada.

Como viene siendo habitual en estos últimos años, la Comunidad de Galicia, concentra buena parte de los eventos de primer nivel nacional. Raña y Noya tienen la culpa de todo. No me quejo por ello, pero... que palizas nos tenemos que meter los 'catalanes'... Por ello tiene doble mérito estar ahí escalando posiciones día tras día en el ranking nacional. En estos momentos debemos ir 8º o sinó bien cerca estaremos.

Pero vayamos al grano. Ferrol 2011: Copa del Rey + C. España Acuatlon. Dos por uno.

Hasta el presente, el equipo tenía su 'techo' en un octavo lugar en Copa y un 5º en Acuatlón. A Ferrol se enviaba una escuadra, casi, máxima. Dificilmente podríamos mejorar el potencia desplegado en otra situación. Paralelamente, se conseguía llevar las chicas justas y necesarias para puntuar en ambos campeonatos. Alta rentabilidad, pero máximo esfuerzo...

Mi misión este finde era doble, o triple. Seguramente lo podría haber hecho otro, pero cuando alguien siente los 'colores' como yo, todo es más fácil. Como digo, mi misión fue la de delegado y chofer básicamente. Menormente, y ya que iba... Me lancé a hacer el Acuatlón en Grupos de Edad.

En mi tarea prioritaria, reseñar que ha sido un placer pero una auténtica paliza de más de 2200 kms de conducción (algunos tramos de gran dureza por la tormenta bíblica de agua y piedra que nos pilló por León), y humilde asistente de equipo en el cuidado de los detalles y control de las clasificaciones-premios.

En la visualización de la Copa del Rey, disfruté bastante con las tres carreras de los nuestros, pese a estar muchas hora depie, corriendo y animando por aquí y por allá. Estuve a punto de tener que substituir a Marc Montalvan en el equipo Open del Prat, tras una herida en el pie de última hora, pero valientemente siguio adelante con su objetivo y el equipo finalizó en una más que meritoria 4a plaza en su categoría. Puliendo algunos detalles en las transiciones, el podium hubiera estado ahí...
Las chicas con apuros en el agua (las corrientes en la ria de Ferrol son muy potentes y si no eres un nadador consumado, el parcial se resiente...). Luego supieron dar el cayo y finalizaron en un meritorio 22º lugar que supone unos puntitos de oro en el ranking nacional.

 Equipo Elite pratense en El Ferrol

Finalmente salieron nuestro chicos 'élite' (que envidia no ser uno de ellos...). En ese momento la corriente era pequeña. La natación no fue demasiado buena para ellos, desaprovechando el nado en grupo ya que se desperdigaron a partir de la segunda boya inexplicablemente. Allí perdieron ya buenas opciones de podium al perder más de un minuto con Diablillos (3º) i VO2  por ejemplo. La transición tampoco fue para enmarcar, pero sobre la bicicleta, recital de Richard en la primera vuelta. No podían darle un relevo. Empezaron a recortar con sus rivales directos a podium y a aniquilar los restantes que podrían entrar en el top10. Otro despiste porqué no decirlo, casi imperdonable en un grupo elite, la entra a boxes 2, con despiste y perdida de valiosos segundos. No se qué hubiese pasado sin los gritos que salieron de mi garganta avisándoles del despiste...
En carrera a pie también hubieron problemas. Rodrigo con una gran contractura/rotura fibrilar en el soleo tuvo que parar unos instantes a estirar perdiendo más de 100 metros. Con gran pundonor logró enlazar en los cuatro supervivientes en los que ya se evidenciaba la fatiga de alguno de ellos. Finalmente Antolí cedió terreno a mitad de la carrera y Rodrigo pudo fortalecer el grupo finalizando con fuerza y firmando la mejor actuación de la historia, un 5º lugar absoluto.

Al día siguiente, me tocaba junto a Erik inaugurar la jornada matinal acuatlética. Era el turno del Campeonato de España de Acuatlón, en mi caso de Grupos de Edad. El 'calentamiento' era complicado. El agua estaba FRIA. Me coloqué un neopreno y comprobé que pese a la aparente calma, la ría venía envenenada. Y encima con sentido opuesto al del día anterior.

Un justito calentamiento y a la cámara de salida. Me tocaba pelear con los grupos entre los 30 y los 45 años. Una buena colocación y salida de potencia intentando llegar al giro de 180º inicial que tan solo estaba a 100 metros en subida, en la mejor posición. Y allí estaba el primero del grupo, girando y encarando el primer repecho del recorrido, el más largo. Me veía bien y decidí continuar comandando el grupo. Las piernas respondían. Me sentía confiado y opté por la estrategia valiente: salir rápido, mantenerme en el grupo de cabeza y nadar con ellos para darlo todo en la última transición.

Hasta ese repecho, todo bien. Luego tuve que bajar un punto el pistón porque empecé a notar las consecuencias de mi atrevimiento. No obstante, y no sin poco sufrimiento, pude llegar a la T1 cerrando el primer grupo. No sabía cuantos rivales de grupo llevaba alrededor. Era difícil, pero sabía que si había alguno, estaba entre los 3 primeros seguro.
La natación fue un dilema. Me tiré relativamente cómodo a pies del grupeto y rápidamente tuve que escoger:

Opción 1: Seguir como un borrego el grupo, viendo que el efecto de la corriente, arrastraba el rebaño lejos de la boya. En esta opción recorres más metros, pero son más cómodos y económicos.

Opción 2.: Buscar yo solo el camino más corto, con el desgaste que ello supone.

Esta fue la opción escogida y creo que no fue la más apropiada, pues los tres individuos que me superaron al final, iban en el grupeto y seguramente, se fue estirando y podría haber progresado en el. Por mi parte, parecía recortar, pero seguro que fui más lento.

Al empezar la última carrera, me encontré rodeado de dos rivales de grupo en boxes. Salí a por todas el tercero de los 3. Al primero lo adelanté enseguida. El otro iba con un endiablado ritmo de piernas. Zancada corta pero potente. Muy bueno para subir. Llegué al primer giro a su espalda y encarando el primer repecho, me la jugué dejandolo atrás. Mis compis me cantaron que tenía gente delante. Mal... Cuesta sufrir así, pero ahí segui, hasta que en la bajada del segundo repecho, me alcanza y adelanta de nuevo el rival de la zancada revolucionada... Intenté seguirle, pero en el último repecho de retorno a meta, pega un palo que me deja 10 metros. Insalvable. Luego me reconoció que se la jugó, que llegó arriba sin más gasolina, pero la bajada le dió algo de aire, y yo no pude con el, ni con el que llevàbamos delante, que estaba a tiro de piedra.

Al final, el ganador a menos de un minuto, la plata a 13 segundos, y el bronce a 6 segundos...  Así es la vida. Medalla de chocolate, como en la Copa con los Open.

Luego las chicas, que cumplieron objetivos en la clasificación por equipos. Laura Maqueda se llevó además el bronce en su grupo de edad. Felicidades!

En el caso de los élite masculinos, tras la baja de Rodrigo por el problema en el soleo de la copa, y la fatiga acumulada, fantástica posición final, repitiendo el quingo puesto como mejor actuación de la historia del club, con un gran Albert Reig y Richard Calle 13º y 15º absolutos, con Noya dando un nuevo espectáculo en su tierra natal.

Un durísimo fin de semana que como pratense apasionado de este deporte y de su club, lo ha sabido disfrutar. Pese a ser un deporte individual, es básico en expediciones como esta el compañerismo y la cohesión de todos. Espero que algunos aprendan de los valores de compañerismo que se mostraron ante tanta dureza y tantos contratiempos.

Próxima etapa: Carrera Vertical.

lunes, 27 de junio de 2011

Prueba NO superada...

Si amigos, como si de un concurso se tratara, el sábado 25 me quedé en el rellano (no puedo decir ni siquiera 'a las puertas'), de conseguir mi reto de entrar en la selección 'pota blava' que defenderá el podium en la Liga de Clubs en Pulpi el próximo 17 de julio.

No estuve a la altura en el triatlón de Puigcerdà. Lo he de reconocer. Venía de una semana complicada, con una noche en blanco sin dormir (la penúltima antes del tri), y parece que no he recuperado del todo muscularmente después de la doble subida vertical del fin de semana anterior (me queda pendiente crónica...). Tampoco me ayudó acabar el martes en el hospital toda la tarde tras una herida profunda en mi mano derecha que requirió de puntos de sutura y que me impidió nadar un metro y me complicó todo bastante. Pero no quiero apoyarme en excusas.


Gran salida la mía en Puigcerdà: atención al hombre de la mano azul... yo mismo.

El caso es que el sábado por la mañana, con todo preparado (guante de nitrilo en mano derecha incluido), me lancé al agua entre una desmesurada densidad de participantes. Perferí asegurar mi integridad física y no meterme en el mejor lugar teórico. Salida desde el lateral, entre las ramas de un sauce llorón, con algunos metros que recuperar en el rumbo, pero con unos primeros metros de lo más tranquilo. No me encontré bien nadando. El agua fría, la hora temprana y mis días sin tocar agua pudieron influir. Vi a Jordi Campos en las cercanías de la primera boya, cuando todo se empezaba a complicar, y vi que no iba a poder nadar mucho más rápido, así que decidí quedarme en ese grupeto de 5-6 triatletas que transitábamos parejos.
Luego me enteré que un grupo de triatletas de los que diambulábamos en posiciones delanteras, se comió la boya y recortó un cacho de recorrido. Lamentable. En una prueba tan corta, dichas maniobras pueden significar la diferencia entre 'entrar'  o  'no entrar' en el grupo clave. Pero eso nunca lo sabremos.

En la transición, me encuentro rodeado de compañeros y enemigos de equipo (...); eran mis rivales el sábado. Sorprendido por ceder tiempo respecto a otros triatlones anteriores con alguno de ellos, pero, claro, ellos también se jugaban lo mismo que yo y supongo que lo dieron todo también en el agua. La cosa no estaba perdida entonces. Al contrario. No iba tan mal estratégicamente hablando. Julio iba adelante (era más que previsible), Jordi Arias y Carlos Mir, en un grupo a menos de 30 segundos, Antolí, salía de boxes unos metros delante mío. Todos los demás 'rivales', detrás mío.

Pero la bici en Puigcerdá no era un trámite; más bien fue la clave de la jornada. Con un primer descenso muy rápido y algo peligroso (incrementado porque a penas había tiempo de calzarse bien las zapatillas), se me fué un cacho Antolí. Tras pasarme León Drajer a gran velocidad, tras el Alex zanuy se dejaba la piel para no perder rueda. Mierda, me había despistado. Una buena rueda perdida, o mala según como se mire, pues quizá era excesiva en esos instantes iniciales de adaptación muscular a la transición. En los 4 kms previos a la subida, conseguí integrar un grupo interesante con Jordi Campos y Edmon Martinez en el. Solo pensaba en la subida, en si los entrenos específicos para mejorar mi pobre rendimiento en las subidas de puertos iban a ser suficientes teniendo en cuenta las malas sensaciones de piernas de los últimos días.

Primer repecho duro del 8% superado. Nos acercamos al grupo de Zanuy  y Antolí. El de Jordi y Carlos Mir se ven a la distancia. A las primeras de cambio veo a Zanuy poniendo pie a tierra. Lo había dado todo desde el lago hasta la rueda de Drajer y caia mareado en la cuneta... En mi grupo se unen dos veteranos ilustres y peligrosos en mi nueva categoría: Amand i Lladó. Ambos son mejores sobre el sillín que yo, pero ese día tocaba aguantar si o si por objetivos mayores.  Pero no pudo ser. En el segundo quilómetro, tras ir cediendo metros, no puedo mantener la velocidad de 26 kms/h que llevábamos y paso a ir a 15... Pasó lo que siempre pensé que pasaría, a la que supero los 5 minutos de sobre-esfuerzo en subida con la bici, reviento.
A partir de ahí, calvario. Uno tras otro me van pasando triatletas de todas las categorias. Me cruzo con Llobet que ya desciende. Juilo va tercero... agradable sorpresa. El resto de compañeros, guardan sus opciones de entrar en liga menos Carlos Mir que veo descolgado solo bajando.

Parte de la táctica planteada era no dejar escapar el grupeto que me superase o con el que fuese a ciertos metros del punto de giro, que fui a reconocer personalmente la tarde anterior. David Montañez (cuarto absoluto en Balaguer B unos días atrás), me deja cerca del punto de giro. Tan solo un trialteta a tiro llegando al final, Martienz Merodio Senior... Su hermano quedaría tercero absoluto... Pues este veterano triatleta (algo menos que yo), subía mejor que yo, pero su destreza en los descensos no era la mejor del pelotón, y el mismo me había dicho antes de empezar que era un negado. Ya será menos, le dije, pero siendo yo bastante pardo en la materia, me había pegado un calentón inútil al cazarlo y aguantarle hasta el giro, ya que en la primera curva vi que tenía que adelantarle... Llegando al final del descenso, me alcanza un grupo que consigo parasitar.

En el falso llano de retorno al lago, cogemos a David Montañez y nos coge Sergi Miró, que está demostrando una buena bici triatlón tras triatlón. La rampa de 900 metros progresiva previa a la T2, se me atraganta de nuevo. Un 21 en mi piña es insuficiente ante tantas carencias físicas. Pierdo grupo y me mantengo como puedo en el siguiente cuarteto que nos alcanza.

Mi moral ya estaba por los suelos y Richard Calle (de voluntario en Puigcerdà), me canta 3 minutos con el grupo de 'promoción de ascenso'. Tarea imposible. Intento hacer transición rápida y maquillar mi desencanto, pero un dolor inusual de cuadriceps y gemelos me azota sin compasión nada más superar a David Montañiz. No consigo nunca coger ritmo. Tan solo sufrir, y cuando has perdido la moral y motivación, cuesta superar tus límites de sufrimiento sin recompensa a tu alcance. En el último quilómetro soy superado tambien por Xavi Dalmau, que está viviendo este año una segunda juventud, apartándome definitivamente del podium de Veteranos 1, aunque en esos momentos iba 4º y demasiado lejos del 3º.

Llego al lago muy descontento y fatigado. Milagros los justos, y el sábado no se me apareció la virgen.

Tan solo me queda el que, paradógicamente es el verdadero objetivo deportivo del año: los Juegos Mundiales de Policías y Bomberos de New York. Allí mi moral y mi autoconfianza serán muy distintas. Siempre me costó verme 'ganador' en triatlon, pero en este otro apartado de mi vida deportiva, es todo lo contrario; tengo una moral de hierro que espero volver a utilizar para colgarme las máximas medallas posibles... Tiempo al tiempo.

Felicidades a todos mis compañeros de equipo que me dejaron en evidencia y consolar a los que como yo nos hemos quedado fuera de este sueño, representar al equipo en una cita tan importante como la Liga de Clubs.

viernes, 24 de junio de 2011

Asalto al tren de la Liga de Clubs

La cuenta atrás, ha empezado.

 Mi última participación en Liga de Clubs (1a división), precisamente en Pulpí (2009)

10 plazas, muchos aspirantes. Como si de una oposición se tratara, unas pocas y preciadas plazas se disponen a repartir entre muchos depredadores de las arenas...

Yo soy un aspirante más, con menos curriculum y puntaje que muchos otros, pero la moral es lo último que se pierde, aunque tenga que sumar a mi habitual cangueli pre-competición, tres puntos de sutura en mi mano derecha desde el martes (una lata de atún maldita...), y un circuito incompatible con mis mejores cualidades. Pero todos sabemos que esto no es 'Bambi' (que por cierto de blanda la peli no tiene nada).

Natación de golpes comprimida en un lago muy frío y de agua dulce (prefiero el salitre), circuito ciclista con una subida de 5 kms, con el inicio duro (lo peor para mis características de ciclista mediocre en llano, malo en subida de más de 3 minutos...). La carrera a pie ya será irrelevante, pues el repecho previo y realmente duro, marcarán bastante las posibilidades de todos los candidatos.

Voy a intentar enumerar los 'rivales' que se presentan en esta oposición en toda la regla:

Richard Calle
Albert REig
Rodrigo Torres
Carlos Lopez
Sergio García

Hasta aquí, ni la más remota posibilidad de desplazamientos. Diríamos que son 'interinos', con un pie y medio dentro de la 'plaza'.

A partir de ahí, se abre un grupo de tanta dureza que podríamos decir que tienen un currículum al que no puedo acceder:  Julio Cardo - Antolí Fauria (joven pero sobradamente preparado).

 Algunos  de los 'gallitos' que repiten pugna esta temporada...

Ya solo quedan tres dedos para muchos gallitos peleones, muchos de los cuales ya me han dejado en evidencia en las competiciones previas de 'calentamiento':
Jordi Arias
Aitor Alexandre: no puede ir  a Puigcerdà, pero fue el segundo hombre del equpo en Manresa, último tri del circuito.
Lucas Chirico
Edmon Martínez
Carles Mir: (tercero en el tri de Blanes...)
Alex Zanuy
Jordi Campos

Cuantos llevo ya....?? Siete, conmigo 8 dedos para tres plazas, y seguro que me dejo gente como David Montañez, con grandísimos resultados en Larga-media distancia, y algunos más que siempre pueden dar la sorpresa.
 
Liga de Clubs 2006, debut de esta prueba y subcampeones de 2ª división en Gijón

Debut en 1ª división. Lugo 2007. Penúltimos por la cola... Richard, 3º

Este mundo es cada vez más competitivo, y yo ya me estoy convirtiendo en el 'abuelo' de este gran club. Estuve en sus primeros pasos, empujando, pero poco a poco, han ido tomándome el relevo, y desde hace mucho tiempo ya no soy ningún pilar deportivo del equipo.
A veces cuesta asumir el destino y el inexorable avanzar del tiempo, pero viejos roqueros como yo nos intentamos resistir alimentados por el entusiasmo que nos genera este gran deporte.

Exitoso pasado en Pulpí 2006 (3º Esp. G.E - 35-39)

Atuendo y actitud que desplegaré en Puigcerdà en mi asalto personal...

Las listas definitivas de esta 'convocatoria  Liga 2011', a partir de la semana que viene...

SUERTE A TODOS!!!

domingo, 12 de junio de 2011

Dos de Dos y el número 'dos' en las dos sedes que empiezan por 'M': Mataró-Manresa...

Con este jeroglífico, titulo esta nueva entrada. La resolución del mismo, durante la lectura del presente post...

Esta temporada deportiva empezó, como viene siendo habitual en mi vida los últimos años, con total incertidumbre, sin saber hasta donde o por donde podría discurrir. Los problemas personales que me han condicionado radicalmente hasta el mes de abril me hicieron tomar decisiones a destiempo y de difícil planificación.


1ª transición en el Triatlón de Manresa luciendo nuevo traje...

Para empezar escogí un objetivo prioritario, que fue el de los juegos mundiales de policías y bomberos, a celebrar en New York a finales de agosto. Carrera de escaleras equipado de bombero como objetivo número uno, triatlón segundo objetivo (entre otras cosas porque me tocará al día siguiente de subir dos veces 49 plantas al 110%, y eso duele...).


Cara de satisfacción tras marcar mejor tiempo en el mundial del 2005 en Quebec

A partir de ahí, debía buscar objetivos intermedios para hacer más llevadera la preparación. Teniendo en cuenta que iba a competir en triatlón en NY, me marqué un objetivo que me hacía mucha ilusión, formar parte del equipo del Prat en la Liga Nacional de Clubs el 16 de julio en Pulpí. Lo he hecho en tres ocasiones y es una competición que me encanta. Conseguí formar parte del equipo que finalizó 5º en el 2009, precisamente en Pulpí, pero el año pasado no estuve en el equipo que subió al podium con un impresionante 3er puesto en 1a división. Sabía que era un objetivo ambicioso, pero al alcance de mi mano.

El dilema surgió cuando a un mes vista del Ironcat, me decido a participar en el, visto la carencia de efectivos para revalidar un triunfo vital en la liga catalana de triatlón. Se puede decir que me sacrifiqué en cierta manera por el equipo, pero lo hice con todo el gusto. Y ese sacrificio dio sus frutos con ese primer puesto catalán, aunque con la corta preparación que llevé, mi resultado individual no fue el deseado, y lo que es peor, me condicionó definitivamente para estar rápido y fresco para el asalto al tren de la liga, luchando con un ramillete de trialtetas emergentes y consagrados del equipo de mucho nivel como para descuidar todas mis armas.

Pasaba a ser un objetivo quizá demasiado ambicioso, con casi 40 tacos y pretendiendo recuperar mi físico y elevar su explosividad y velocidad en unas pocas semanas. Y ahora estoy 'sufriendo' las consecuencias con las dos primeras pruebas en busca de la clasificación interclub.  Mataró y Manresa, dos pruebas para hacerme ver y empezar a contar en esa lista final que debería tenerse clara a finales de junio.


Parte de los rivales a batir de cara a Pulpí... (gracias por el montaje, Sergio)



MATARÓ:

En la primera, Mataró, la lluvia condicionó de tal modo que pasó a ser un acualtón compacto, dado que se permitía llevar neopreno y por tanto se nadaba primero y se sumaban las dos mangas de carrera  a pie en una única al finalizar la natación.
Fue una salida multitudinaria en la que venía de haber marcado un gran parcial en las aguas del Ironcat. Muy buena salida por mi parte, pero me quedo en medio de las dos puntas de flecha que marcaban cabeza de carrera, y ello me condiciona de tal modo que modifico mi trayectoria perdiendo fuelle. Me metí en el mogollón y recibí algún que otro golpe, quedando ya hipotecado al puesto que me encontraba. El 45º de los muchos centenares de participantes no parece mal puesto, pero me supo a poco. Salí cerca de gente importante en mi camino hacia Pulpí y traté de correr fuerte, pero las piernas no me respondieron. Sufrí bien y lo mejor de todo es que pude incrementar el ritmo en la segunda vuelta, que siempre es buena señal. Al final el 32º de la general y un agradecido SUBCAMPEONATO entre los Veteranos 1, por delante del ilustre Amand Redondo, alma mater del C.T. Manresa, incombustible donde los haya, y uno de los pocos que quedan en activo con más antigüedad que el menda.


 Ahora lo que luzco son las lupas Eassun X-Light, lo mejor que se ha fabricado para correr...


MANRESA:
Tres días de agujetas por la falta de costumbre de acumular ácido láctico de esta manera y ya de nuevo otro tri sprint, en el que ya entraban al trapo buena parte de los rivales a batir de cara a mi objetivo de Pulpí. Al fin remite la lluvia y la bici asegurada.
Dos días antes había dejado la rueda trasera en Valbuena para un repaso y me había colocado mi Ksyrium SL, que son más ligeras y llevan un desarrollo más progresivo, además de calzar un neumàtico de más agarre que el económico que llevaba en la habitual, que me había dado un par de sustos en mojado unos días antes. Dada la incertidumbre meteorológica, preferí no jugármela y rodar con un neumático mejor. Pero paradojas de la vida, la susodicha rueda acabó perjudicándome. La disposición en la Cerveló P2-C de la rueda trasera, está demasiado cerca del cuadro. Cualquier gravilla que agarras, acaba rozando el cuadro. Hinché a tope el neumático justo antes de carrera, y parece que la palometa de cierre no la tenía suficientemente ajustada. Resultado: cuando la cosa se puso fea en los primeros escarceos de la bici, el neumático empezó a tocarme el cuadro. No era continuo, pero aparecía en los momentos de máxima potencia y por consecuencia, de máximo patiment... Haciendo la goma en un grupo que se está formando y que no paran de sucederse los tirones, solo falta que se frene la rueda... Ya era una cuestión mental. Cuando te mueres sobre la bici, solo falta que te lleguen imputs negativos que no controlas para vencerte y tirar la toalla. Además, teníamos el viento a más bien favorable, y ello hacía que los de adelante no notasen tanto su posición, incrementando el ritmo.

Pero vayamos al principio. La natación. Mala donde las haya. Nunca nadé bien en esta prueba. Demasiada gente, mala salida (nula para variar), golpes, tragos de agua, acelerones y braceos de supervivencia, nervios, tensión, gritos... en fin, nada de lo que me gusta. Como resultado, me quedé engullido por la masa y no fui capaz de escaparme de sus redes en ningún momento, más allá de fugaces momentos a partir de la segunda boya. 37º del agua. Mal, insuficiente, desmotivador.


 Gracias Sergio de nuevo por el equipo de reporteras que desplegas en toda carrera... que haríamos sin ellas!
Por contra, hice una transición decente y me encontré justo tras Lucas, gran ciclista que lo demostró con el segundo mejor registro sobre las dos ruedas, y muy cerca de varios compañeros-rivales del reto ya planteado, mi 'clasificación'. Me dejé las piernas colocándome a centímetros de Lucas hasta que se constituía lo que sería el segundo grupo de carrera, con Edmon también en el mismo grupeto. También estaba allí Hector Nadal, cuarto al final de la prueba. Como he contado antes, aparecen los problemas de la rueda y mis piernas no dan más. Llegado a Sant Pedor, con giro de 90º y viento totalmente favorable, era imposible recuperar los 5 metros perdidos y no tenía sentido darlo todo en solitario. Me espero a ver lo que viene por detrás, pero bajo demasiado la velocidad, con lo que al pasarme tres triatletas (entre ellos Jordi Campos, otro de mis rivales...), tengo que baciarme para enlazar y en el siguiente repecho, vuelvo a tener los mismos problemas con el neumático. Otro grupo perdido. Todavía quedaría un pelotón más para perder, en el que transitaba Alex Zanuy (más rivalidad perdida), que me enganchó poco antes del polígono, donde las rampas me impedían ir sentado y se multiplicaba el frenado. A la porra el tercer grupo y acabando el último repecho del polígono, me pilla y se forma un gran grupo en el que iba, entre otros, Robert Buday, Ruben Barrios (los dos me pasaron corriendo en Mataró que casi me tiran al suelo del aire que levantaron), y muchos otros como Eduard Barceló, joven pero vieja gloria ya del tri catalán. Dado el tamaño del grupeto, y puesto que pasábamos a ir contraviento, era más sencillo aguantar ahí. Incluso me parece en ocasiones que vamos parados... Veo tambien a Sergi Miró del equipo, y decido ir a cola esperando la transición en la que ya no sabía que hacer, si dejarme ir definitivamente, dado el fracaso del día, o probarme a pie ya que estaba ahí.

Con esa incógnita, empecé con alta frecuencia de zancada y me empecé a encontrar sorprendentemente mucho mejor que en Mataró. Adelanté muchos más triatletas que me adelantaron a mi y veía como los mejores a penas ganaban algún metro en los cruces. Con esa motivación, fui a más, con buenas sensaciones y un gran apoyo del equipo de suporteres desplazado al Parc de l'Agulla. Veo a Jordi Campos a tiro y incremento el ritmo hasta tenerlo al alcance de un potente sprint que consigo hacer. Lo alcanzo justo en linea de meta y lo agarro para entrar juntos. Algo es algo, dijo un calvo.

Sacando conclusiones positivas (siempre es necesario), tengo excusa para el desastre en bici (aunque se que quizá el resultado hubiese sido similar con la mejor rueda), y un parcial a pie tan solo superado por 8 segundos por el mejor del equipo, y mejorando sensiblemente respecto a Mataró. Nuevamente consigo ser segundo en Vetarano 1, haciendo doblete en mis dos actuaciones seguidas de Mataró y Manresa... Ahora se resuelve el jeroglífico...

Ello me hace ser optimista de cara al gran día, PUIGCERDÀ, en el que nos jugaremos todas las opciones en un circuito duro, pero quien dijo que iba a ser fácil.

domingo, 22 de mayo de 2011

Ironcat - se acabó la gasolina... 2ª Parte.

Y ahora empieza la parte de la crónica en la que se justifica el título del 'post'.


Las sensaciones sobre la bicicleta desde la primera vuelta habían hecho saltar las alarmas. La relación entre esfuerzo invertido y rendimiento obtenido era mala de solemnidad. Al no ser un día ventoso, no había descanso y si dejabas de pedalear, te frenabas de golpe (como me pasó en las dos veces que alivié la presión abdominal, en la aplicación de la vaselina en entrepierna (...), y en la ingesta del bocata de jamón).

No era el primer triatlón de estas características en el que me empleaba bastante a fondo sobre la bicicleta. En otras ocasiones en las que mi preparación era más adecuada, podía llegar medio roto a boxes, y empezar a correr sorprendentemente bien.  En esta ocasión, todo era una incognita, pero la lógica hacía temer lo peor.

Tras retrasarme de Jordi tras mi última descarga mijitoria en los 5 kms finales, llegabamos a boxes, J.Vazque, J.Arias y un servidor en este orden. Acababa de desembarcar el grueso de suporters del equipo y el ambiente  al rededor del puerto deportivo era francamente motivador. Tras descabalgar de la cabra, el primer contacto con el duro asfalto me hizo maldecir un famoso neuroma, el de Morton... Tras meses sin acordarme demasiado de él, las casi 5 horas y media de presión sobre mi cuarto metatarso habían dado sus frutos... El dolor no era inaguantable, pero me invitaban a masajear un poco la planta de mi pie derecho. Y así lo hice.



Instante de aparición de las agradables consecuencias de un neuroma de Morton de caballo...

Aproveché que tenía que atarme los cordones de las zapatillas (no venía de ahí este año), me senté en el suelo y manipulé la zona plantar derecha para liberar algo de presión en la zona. Luego: gorra, gafas de carrera, un gel energético de emergéncia, un omeprazol (para proteger en lo posible el estómago), y la bolsita de crema solar factor 50 plus... Además, una aplicación de crema antiabrasiva para mi entrepierna. El lucir look triatletico años 80 tiene sus inconvenientes...

Más consecuencias de portar ese look 80's y de tener el brazo más rígido que la naríz de pinocho...

Si es que ya estoy viejo y hecho una calamidad;  parezco ya una princesita cada vez más, con lo rudo que yo era... La crema solar me la puse de cualquier manera. Llevaba tanto tiempo parado en boxes  que no quería perder más tiempo. Además, la zona de más sufrimiento por radiación solar, quedaban fuera del alcance de mi rígido brazo.  Y pensar que en Austria 2002 hice el mejor parcial en la transición 1, y uno de los mejores en la transición 2...

Las sensaciones en el primer quilómetro de un IM són definitivas. Si estas bien y vas algo eufórico, no tienes ninguna seguridad de poder aguantar así toda la carrera, más  bien al contrario, has de controlarte. Pero si ya sales rendido, las cosas están más claras. En una sola ocasión salí a correr así de mal, y fue en la meca del triatlón: Hawaii. Por aquel entonces, muchos factores se tradujeron en un vaciado físico integral que me pasó factura en la maratón.

Pues en la Ampolla, 9 años más tarde, recordaba sensaciones. La falta de potencia juvenil la supe compensar con experiencia y gran apoyo de compañeros de equipo. El formato de la carrera, genera hasta 12 pasos por un mismo lugar, multiplicando la ayuda que ello supone al corredor herido de muerte... En Kona (Hawaii), tan solo se hace una vuelta en la que el bucle corto, se acaba a los 10 kms, y desde allí, 32 kms de soledad, lava retorcida, asfalto radiando calor y deformando la visión... Un calvario para el corredor derrotado.

Poco a poco iba perdiendo fuelle en territorio deltaico respecto a mis compañeros de equipo. El consuelo era que mi función prioritaria era el apuntalamiento del mismo, y con un buen resultado suyo y aguantando el tipo por mi parte, el triunfo en liga catalana estaba al alcance. Desconocía la posición de Santasusana, el principal hombre de Reus, pero Robert Mayoral iba muy adelantado merced a su gran registro ciclista. El tercer hombre de su equipo no lo tenía controlado, pero había que aguantar como fuera. Vallirana tambien era una gran amenaza, con diversos hombres en nuestras posiciones, remontando quilómetro a quilómetro con su capitan en cabeza, un gran Toni Pallarés, fijo en cada salida en el puerto de la Ampolla. Con el mantengo siempre un bonito duelo gracias a su gran fortaleza física y mental que le hace correr francamente bien.

Hace tres años, luchando por el campeonato de Catalunya de ultradistancia allí mismo, me hizo apretar los dientes, los pelos y hasta las orejas, para no ser adelantado en el tramo final, obligandome a hacer casi casi un par de quilómetros al 'sprint' para asegurar la victoria. Esta vez, tengo que descubrirme la gorra y felicitarle por su incontestable victoria sobre mi humilde persona... Felicidades Toni!

Pues ahí iba yo retorciendome, intentando engañarme a mi mismo con el típico concepto de: ' ya queda menos', o el 'ahora pillo ritmo y se van a enterar...', y esas cosas que uno intenta pensar para hacer más llevadero el purgatorio triatlético. La realidad era que estando en la segunda vuelta, iba muerto literalmente y me quedaban todavía cuatro vueltas y media...  No quería parar a toda costa, pero a la vez sabía que en determinados casos, es mucho más rentable caminar rápido un rato que aguantar 'saltando' a 2 km por hora...

Por ello, en la quinta vuelta, decidí pecar y caminé tres de las cuatro subiditas que en la zona acercamiento a boxes habían. Ello me dió una pequeña inyección de aire fresco para afrontar la 'recta final' de aquella tortura.

Entre tanto, Jordi Arias seguía corriendo siempre un punto por encima mío, ampliando su ventaja hasta los 10 minutos en meta. Me mantenía el feudo del Ironcat invicto entre los pratenses (a excepción del gran Dani Fernandez Ledesma...), i em vas doblegar amb coratge... Felicitats Jordi! .

 



En mi otro duelo particular, un temible y fornido Jordi Vazquez se presentaba como una gran amenaza. Tras lanzarme un guante en señal de reto en la maratón de Barcelona, las apuestas estaban apretadas... Francamente pensaba que ya en la natación iría por delante mío, pero tras mi sorprendente rendimiento, pasé a esperar su adelantamiento en cualquier momento. Sé que su punto más debil a priori podría ser el ciclismo, pero pese a su carencia de tiradas largas, esas 20 horas semanales de spinning intenso, me tenían acojonado... Madre mía, no he llegado ni a las 20 horas semanales de entreno sumandolo todo... Pero hay que reconocer que pese a que en spinning se pedalee, no es lo mismo que acoplado sin parar durante horas en una bici. Una vez me superó en la quinta vuelta ciclista, tenía claro que mi única oportunidad pasaba por hacer una maratón como las buenas que ya he hecho en varias ocasiones, y que el sufriera un desfallecimiento.

Cuando empecé a correr, ví que no tenía NINGUNA posibilidad de adelantarlo, y más cuando veía que km a km, los dos Jordis se alejaban cada vez más.



Pero esta modalidad triatlética tiene muchas caras, muchos matices, mucha tela, y pese a hacer una maratón más que mediocre comparativamente con la mayoría de mis anteriores participaciones, el señor Vazquez sufrió un importante bajón a partir de la cuarta vuelta y poco a poco, pasito a pasito me fuí acercando hasta tenerlo a tiro y precisamente superarle a la altura de los suporters pota-blava... En otra situación me hubiese amoldado a su ritmo para trotar juntos, pero estaba sufriendo tanto, que solo pensaba en acabar y la posición por equipos estaba más que comprometida. Había que seguir dándolo todo pese a salvar los muebles particulares ante mi posición intermedia en el duelo inter-club...



La última vuelta en toda prueba de ultradistáncia suele inducir un subidón de adrenalina que se debe fabricar con el sudor y las lágrimas de tantas horas invertidas (porque no me puedo explicar de donde narices sale esa energía cuando no hay más), y el 'disfrute' experimentado en esos instantes, y tras cruzar la línia de meta, es el alimento para una nueva aventura IM. Como decía aquel anuncio de bebida isotónica... 'El ser humano es extraordinario...'

miércoles, 18 de mayo de 2011

Ironcat - se acabó la gasolina... 1ª Parte.

Catorce triatlones distancia Ironman completados con éxito. Parece mentira, pero así es. El tiempo no frena, y como consecuencia, la antigüedad de mis tejidos también sufre las consecuencias. Uno gana experiencia, conociendo casi a la perfección cual será la respuesta del organismo en todo momento, y cual ha de ser el límite que no hay que superar. Por contra, la experiencia tambien lima la ilusión de volver a ser finisher. Siempre supone una gran satisfacción cruzar la meta cuando el esfuerzo ha sido titánico, pero la recompensa es menor en mi caso cuando el 'único' beneficio redunda en sumar una carrera más, sabiendo que conseguir una marca destacada o un puesto individual de mérito és imposible.


 Ante la falta de alicientes, se me ocurrió volver a la clásica indumentaria bañador-top tan común hace unos años y tan pintoresca en nuestros tiempos. Me encanta... cuanta libertad muscular!!

Afortunadamente, mi participación en la edición del 2011 en l'Ampolla venía muy condicionada con la 'necesidad' de apuntalar el equipo para la clasificación de la Liga Catalana y en la propia prueba, donde tradicionalmente el Prat siempre ha destacado. Y por ahí, las cosas han ido muy bien, y por ahí, he podido justificar tanto sufrimiento en los peores momentos de la prueba.

Me acuerdo ahora del historial 'IM' (y similares), y valoro muy positivamente como he podido superar cada obstáculo:

1-  1999.- Home de Ferro. 10 horas 27 minutos. 27º general. Campeonato Espanya LD.
2-  2000.- Quelle Ironman Roth. 9 horas 48 minutos. Campeonato Europa IM
3-  2002.- Austria IM. 9 horas 22 minutos. Clasificación Hawaii !!
4-  2002.- Hawaii IM. 10 horas 48 minutos.  Hundimiento en la maratón... (más de 4 horas)
5-  2005.- IronCat  9 horas 21 minutos. Tercero General
6-  2006.- Lanzarote IM. 10 horas 50 minutos. Viento descomunal...
7-  2006.- IronCat. 10 horas 8 minutos (seis dias despues de Lanzarote...)
8-  2007.- Frankfurt. 9 horas 17 minutos. Clasificación Hawaii; mejor marca personal
9-  2008.- Brasil. 9 horas 54 minutos. Aparición Neuroma Morton: maratón dinamitado
10-2008.- Challenge Roth. 9 horas 32 minutos. Lluvia incesante, frío intenso. Maratón en 3:06. Subcampeón mundial Bomberos.
11-2009.- IronCat. 9 horas 30 minutos. Campeón de Catalunya LD
12-2010.- IronCat. 10 horas 18 minutos. Viento descomunal...
13-2010.- Embrunman. 12 horas 30 minutos. Sin palabras...
14-2011.- IronCat. 10 hores 9 minuts. Mejor parcial  en el agua...

Además, 8 triatlones distancia C y ni recuerdo cuantos medios, halfes, dobles olímpicos y similares...

Mirandolo así, puede impresionar, pero estamos hablando de un periodo de 12 años... que dan para mucho, pero los resultados han sido muy buenos para mi.

Ahora sí, hablemos de la prueba en concreto...

Llegaba a la línia de salida con gran incertidumbre y baja confianza en mis posibilidades de estar a la altura de otras ediciones. Siempre había estado en un orgulloso Top10 de la general y parecía imposible. Las condiciones fueron las anheladas por mi: mar y viento calmados y calor en maratón.
 Unico momento de cierta 'velocidad' el sábado, aprovechando la bajadita de uno de los repechos...

El circuito de natación se había ampliado en una vuelta, lo que hacía más fácil la orientacíón y nos alejaba del puerto de la Ampolla menos. La cesión del Aquaman Cell Gold por un día de Richard Calle como prueba, pese a ser de una talla inferior al a que me pertoca, me dieron alas y su comodidad me hizo nadar con ganas.
Una colocación inmejorable y unos primeros metros rápidos me pusieron en primera fila ante la primera boya. Ví un participante muy fuerte desde los primeros metros y me centré en el grupeto que se formaba a mi alrededor. Me encontraba muy cómodo y preferí ponerme a pies en los primeros compases especulando un poco ante mi falta de confianza.

Ví a Jordi Arias junto a mi y decidí mantenerme en ese punto. La segunda vuelta la empecé a pies de Jordi hasta 2/3 partes de la misma. Llegando al inicio de la tercera vuelta, decidí ponerme en cabeza de grupo para colaborar un poco en el trabajo tras un buen rato a pies. Empezamos a doblar participantes y con las gafas empañadas, me iba 'comiendome' todos los doblados.... En el último tramo, con el sol de cara, pedí que me relevaran para no desorientarme, pero ante la indecisión, fui tirando y ya decidí mantenerme en cabeza hasta el final. Durante mucho tiempo, pensaba incluso que iba en cabeza de la prueba. Fue bonito... la verdad, y en parte apreté más de la cuenta, pudiendo influir en las dificultades en la bicicleta. Pero valió la pena.

Nada más salir del agua, me cantaron que era segundo, y se me bajaron los humos. No obstante, los 51 minutos me dieron una grata alegría, y más cuando tenía tan poca confianza ante mis cambios de estilo que todavía no se habían traducido en mejoras en los ritmos.

Sobre la bicicleta, las cosas fueron según lo que tenía previsto. Malas sensaciones, especialmente incomodidad acoplado en la cabra por la falta de adaptación. Tan solo 3 entrenos previos son, obviamente, insuficientes. Los ciclistas iban pasando y la impotencia iba creciendo, pese a que saber el guión de la película, ayuda a no ponerse nervioso. Solo conseguía acoplarme cuando el aire tendía a soplar en contra. Siempre sufriendo, desde el primer golpe de pedal. La velocidad no era mala siendo fríos, siempre por encima de los 31 km/h, y llegando a 36 en algun tramo.

La carrera pasaba a centrarse en la competividad y a la vez compañerismo pratense buscando el mejor resultado de equipo, pero intentando ser el mejor de todos... Me mantenía entre los 'Jordis' (Arias y Vazquez), con pocas diferencias. Empezando  la tercera vuelta, Arias sufre un bajón y lo paso con mis propios problemas físicos. De ahí en más, fuimos más o menos cercanos hasta el final. Cuando dejaba de pedalear para 'alibiar presión de la bejiga', o comerme el bocata de jamón que este año intercalé en el recorrido (más complicado que comerse un cuarto de quilo de polvorones en el Sahara a mediodía). Hacía demasiado calor y no daba a basto con los líquidos. Vázquez nos alcanzó en la quinta vuelta y le animé a seguir su progresión con vistas a recortar tiempo con dos rivales del Reus, Santasusana y Mayoral, que nos habían quitado las pegatinas tiempo atrás a Arias y a mi.

(continuará...)

miércoles, 11 de mayo de 2011

Miedo Escénico

Siempre he sido algo 'llorón' comentando mi estado de forma, o en el previo a la competición. Tampoco es lo mismo valorar el estado de preparación físico y mental para una prueba 'convencional' o para un reto como un triatlón en distáncia IRONMAN.

Desde el nacimiento de mi hijo, mi presencia competitiva ha ido cayendo empicado y he seleccionado más mis participaciones. Este año lo empecé sin objetivos claros, con un mundial de bomberos y policías para finales de verano que priorizaba por encima de todo, y algo 'quemado' de varias temporadas con mis anhelos centrados casi exclusivamente en la larga distancia, que no la media, para la cual ya no soy nadie.

Mi intención era no participar en ningún triatlón más allá del olímpico (una de las pruebas que haré en los mundiales de New York). En febrero me puse en manos de un gran entrenador, Alvaro Rance, con el que pretendía dar un vuelco a mi mentalidad de entrenamiento. Su visión como triatleta y entrenador de deportistas de todos los niveles, le hacían buen candidato para poder ocuparse de una preparación un tanto especial, la mía... Centrando su trabajo en la técnica (tan descuidada por tantos años de 'machaqueo larguero'), y darle margen al cuerpo para recuperar entre intensidad y intensidad.  Planificamos unos objetivos adecuados a los mencionados al principio del párrafo cuando de repente, me vi 'inmerso' en la 'obligación' de asistir al IRONCAT. ..


Por un lado, la béstia humana Jordi Vazquez (Korje para los blogueros), me tiró un guante en público a modo de desafío durante la maratón de Barcelona, con unos chillidos que se enteró hasta el alcalde, que estaba en la meta esperando para salir en la foto. Luego me dispuse a chafardear la lista de inscritos en el Ironcat y abrí, vi, y decidí.....

Con un Jordi Arias renovado, subiendo enteros año tras año, sin duda más fuerte que en la pasada edición, un Jordi Vazquez valor seguro por su fuerza, su convicción y su mente de auténtico devoraquilómetros, faltaba un 'ayudante' para volver a ganar por equipos esta mítica prueba. Cuento mis participaciones en el Ironcat por victoria por equipos, y con el objetivo claro de ganar 'por fin' la liga catalana de triatlón (hemos hecho segundos varias veces), no podíamos desaprovechar la oportunidad de ganar en l'Ampolla. Sin  tirarme a la piscina, no se hubiera ni puntuado...  Un sacrificio 'por la causa', que se saltaba a la torera todo lo acordado con Alvaro y la lógica deportiva.


Pero entonces recordé que un día, cometí la locura de hacer el propio Ironcat a los 6 días de haber hecho 10 horas 50 minutos en una de las dos ediciones más duras de la historia del IM de Lanzarote, y pese a reventar en el km 20 de la maratón, conseguí acabar top 10 en poco más de 10 horas... Eran otros tiempos, con mucha más capacidad que ahora, con menos edad, mejor preparación, etc, pero con las mismas piernas, brazos y cabeza. ¿Porqué no iba a poder acabar dignamente esa prueba que me conozco al dedillo sin la preparación suficiente?. A última hora he visto que tambien se ha apuntado el grandísimo Ricardo Lazarte, incombustible y un auténtico valor seguro para todo club, capaz de finalizar una prueba IM con la horquilla rota... Pero ya era tarde para desprogramar mi simple cerebro. Como mínimo se que podemos fallar uno de los tres de alante, que Ricardo, siempre está ahí!!

Se que en condiciones más habituales, podría optar a una gran posición en esta carrera para la que por suerte, pronostican una climatología perfecta para mi: poco viento, nada de lluvia, y SOL... Faltaría más calor para mis mejores atributos, pero yo también sufro con calor y ya me está bien así.  Parece una edición para 'salirse' en la marca, pero vamos a esperar  al sábado a media noche para hablar... que esto es IRONMAN.

A todo ello sumarle mis graves problemas personales que he apuntado en entradas anteriores, con una separación drástica y lesiva para mi, una mudanza salvaje estos días pasados que todavía continua coleando, y la organización del Triatlón del Prat, que siempre me deja tocado por los días sin a penas dormir y el estres.

Todo sumado un cocktail bastante perjudicial para cumplir objetivos.

Pero lo peor, a mi entender, es la falta de quilómetros, y sobretodo, la ausencia de los entrenos 'claves' que siempre he realizado ante una cita como la que se avecina. Alvaro no tiene la culpa, pues no ha tenido tiempo material para preparar. Sin mis tiradas de 25-28 kms a 4' el km (siempre presentes antes de un IM en mi preparación), la ausencia de más de dos etapas de largo quilometraje, los tres únicos entrenos con la posición 'cabra' (todavía me duelen los brazos, las lumbares y el cuello de la falta de adaptación), y las sesiones realmente cortas en el agua, con un cambio de estilo en el crawl, para el que todavía no estoy adaptado para progresar, más bien voy más lento todavía que antes del cambio...

Si miro las horas y quilómetros acumulados hasta la fecha en los tres últimos años, estoy en una media de 14 horas semanales, cuando los anteriores estaba rondando las 20 horas, corriendo voy por promedio de 28 km semana, y en agua poco más de 8000, y en bici algo más de 240 km... Son números totalmente insuficientes para darme confianza, y más con el increíble desgaste de estas dos semanas con la mudanza, la falta de sueño galopante y el estres de separación y triatlón Prat.

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Vaya con la publicidad electoral subliminal del cartel oficial... pero si así se manda al tontito del Hereu a su casa MEJOR!!

Excusas, muchas excusas, como también las puse el año pasado en mi entrada previa al Ironcat ('Llorando')... Si analizo su contenido, puedo sumarme a lo mismo (casualmente también me mudé entonces y el triprat fue por esas fechas), pero sumando una semana menos de recuperación, ya que este año el Ironcat es una semana antes que el pasado. Entonces tampoco rendí tan mal en la carrera. Este año, siendo un año más viejo, arrastrando aún mi neuroma de morton y otras tantas cosas, se que a partir de superar la primera boya, puede pasar de todo. La incógnita la desvelaremos pronto.

Valor y al toro!!