RETROSPECTIVA:
Verano de 2003- Barcelona. Juegos Mundiales de Bomberos y Policías. Una semana inolvidable para mi. Lo más parecido a unas olimpiadas en lo que seguramente podré participar en mi modesta vida como deportista aficionado. Más de 10.000 competidores, inauguración en el Estadi Olímpic de Montjuic, desfilando por la misma pista....
Una ola de calor sahariano azota la ciudad condal con temperaturas superiores a los 35 grados. La prensa se concentra espectante ante la que se corona como prueba reina de los juegos: la Stair Race.
No era mi primera participación en unos juegos de este tipo. En Indianàpolis 2001, ya participé en diversas pruebas, pero no conocía esta en concreto. Un mes antes de la cita barcelonesa, regresando de mi despedida de soltero (...), empalmé directamente con un 'test' que consistía en subir las 40 plantas de la Torre Mapfre, escenario de la carrera, equipado hasta las orejas de bombero... Este es el 'techo' arquitectónico de Cataluña. No había probado nunca la experiencia, pero llevaba bien la preparación del triatlón. Diversos compañeros de Bombers de Barcelona ya habían estado otros días entrenando y incluso alguno había competido en Indianápolis en esta prueba.
El resultado fue gratamente sorprendente al realizar el mejor tiempo de todos con cierto margen, haciendo 5' 40'' aproximadamente. Si en aquellas condiciones había rendido así, parecía que se me podía dar bien el evento...
Llegó el día de la verdad y el calor era extremo. Muchos nervios ante el reto. Desde la base de la torre se veía muy alta la azotea. Además, una característica poco usual en esa escalera era la longitud de los tramos de escalera, pues lo habitual es que hayan dos tramos por planta, y en este caso era único, incrementando la dureza.
El resultado no pudo ser mejor para mi. 5'01'', mejor tiempo de la prueba, a distancia del segundo y tercero. Una medalla de 'oro' que me sabía a gloria. La repercusión mediática fue enorme para lo que me podía imaginar. Televisión, radio y prensa gráfica de los primeros medios. Todos interesados por el triunfo.
Podium, junto al que sería mi verdugo en los siguientes juegos (a mi derecha), i toda una institución en este mundillo, el sargento Gomez Milara de Madrid.
El éxito me hizo convencer que tenía cualidades para esto y no dudé en prepararme de nuevo para los siguientes juegos en el 2005 en Quèbec (Canadà). Allí tenía un importante handicap; el día anterior a la prueba, competía en Triatlón, en un circuito distancia olímpico, sin drafting, y con un perfil muy exigente. Hizo un día también de mucho calor y me estruje al máximo para ganar en triatlón la medalla de plata. Parecía difícil poder rendir al máximo en menos de 24 horas y en una prueba tan explosiva y tan exigente a nivel muscular.
Sin embargo, nuevamente me sorprendió mi capacidad en subir escalones consiguiendo el oro en mi categoría (senior A), y el segundo mejor de la general, precisamente tras el medallista de plata en Barcelona(Víctor Tornero). Además, en la subida sin equipo de intervención y en la combinada por equipos, me hice con algunas medallas más...
Sin embargo, nuevamente me sorprendió mi capacidad en subir escalones consiguiendo el oro en mi categoría (senior A), y el segundo mejor de la general, precisamente tras el medallista de plata en Barcelona(Víctor Tornero). Además, en la subida sin equipo de intervención y en la combinada por equipos, me hice con algunas medallas más...
Podium senior A junto a un polaco y al madrileño que fue segundo mejor tiempo en la general de Barcelona (los bomberos de Madrid no viajan sin la bandera española...)
El nacimiento de mi hijo Tiago en marzo del 2007 truncó mi cuarta participación consecutiva en unos juegos mundiales de bomberos y policías, y la oportunidad de revalidar el oro en la especialidad. En aquella ocasión, la ciudad australiana de Adelaida era la escogida para la cita mundial.
Tocó esperar a la edición del 2009 en Vancouver (Canadá), para volver a intentarlo. Allí la complicación vino por la precipitación. Si al largo vuelo transoceánico con escala le sumamos la impotencia para dormir en el albergue para jóvenes juerguistas del centro de Vancouver en el que recaímos, el hecho de estar ya con el dorsal puesto a las 8 de la primera de las mañanas, hacía las condiciones muy poco idóneas. No obstante, tampoco puedo quejarme de mi rendimiento al conseguir lo que no había conseguido nunca antes: un oro y una plata individuales en la especialidad. La plata en la subida equipado, el oro sin equipar. Hubiese preferido intercambiar medalla y mantener mi 'dominio' por tercera vez consecutiva, pero así es el deporte. Un canadiense del mismo Vancouver imagino que estuvo entrenando duramente en el mismo Hotel Sheraton escenario de la carrera durante largo tiempo. No obstante, esa plata me sentó muy bien!!
Pero el germen de la carrera vertical ya me había infectado y mi faceta organizadora brotó rápidamente poniéndome manos a la obra en busca de algún colaborador. Joan Valbuena fue el aliado perfecto, y la encomiable ayuda de Fernando Gonzalez, gerente de la empresa AIRBOX, junto a la predisposición del Hotel Hesperia Tower, permitieron hacer realidad un proyecto, el de la carrera vertical del Hotel Hesperia Tower, que busqué organizar como previa al mundial de Vancouver.
La prueba fue un éxito en su día. Sin prepararme ni calentar, habiendo dormido un par de horas como máximo y teniendo que montar, dirigir y ponerle voz al evento, me lancé a subir la torre consiguiendo un nuevo oro en mi categoría, y el tercer mejor tiempo a 6'' del que poco después se coronó como rey de las escaleras en Vancouver haciendo el mejor tiempo de la carrera: Mario Verdugo.
Haciendo pues un balance de la relación inversión en entrenamiento-resultados, no he conocido en mi vida nada igual. Es por ello que para mi la 'Stair Race' será un referente que me acompañará siempre en mis recuerdos, y que me hará sentir un poquito importante dentro de mi convicción de que la clave de mi éxito es la reducida población deportista que se prepara para este tipo de pruebas.
Tras estos 6 años alimentando esta idea en mi cabeza, este año quise dar un paso adelante y conseguir como fuese un primer Circuito Nacional de Carrera Vertical en España. No hay ninguna duda que a nivel mundial, en España es donde nos hemos tomado más en serio este tipo de carreras para bomberos y prueba de ello es que el 80% de los podiums tirando por lo bajo en los campeonatos mundiales, son ocupados por profesionales de nacionalidad española.
Pensé que era hora de volcarme en mi faceta organizativa y dejar un poco de lado la deportiva. En un principio tenía claro que no debía participar en ninguna etapa del circuito si quería 'garantizar' mi trabajo como director de competición y speaker. Por ello no entrené un solo día ni me llevé el traje en la primera de las etapas. No obstante, y esto tendrá que ser harina de otro costal, no pude resistirme a participar ni en Valencia ni en Hospitalet.... (próximamente más detalles...)
Víctor!!! Que m'he fet un bloc, jejeje. Ja aniré seguint les teves evolucions!
ResponderEliminar